Santos Álvarez había venido a Chile varias veces dirigiendo a equipos trasandinos para enfrentar a los representativos locales. Incluso, había estado presente en los dos mundiales realizados en nuestro país: en 1962 como jugador y en 1980 como técnico.
A principios de diciembre de 1987 estaba nuevamente de visita. Ahora a cargo del Concepción Patín Club que se coronó campeón en el Sudamericano de Clubes Campeones disputado en la cancha de la UMCE, tras vencer en la final a Thomas Bata por 3-2.
Por esos días el ambiente en torno a la Selección era pesimista. Tras el descenso en Sertaozinho, en el Sudamericano disputado en julio la Roja terminó en el tercer puesto, entre tres participantes -con apenas un triunfo en cuatro partidos jugados-.
Con ese marco, el directorio de la Federación se acercó a Álvarez. Se le ofreció el cargo del seleccionado para buscar el retorno a la Serie A en el Mundial fijado en Colombia.
El sanjuanino aceptó. Y ya en marzo de 1988 comenzó sus labores. Observó, definió y sacó conclusiones tras los partidos amistosos. Designó el plantel, encabezado por Osvaldo Rodríguez quien continuaba con sus buenas campañas en la Liga italiana. Sin embargo, sólo días antes del viaje a Bogotá para la ambientación en el país cafetero, el viñamarino quedó descartado por una dolencia muscular.
Abstrayéndose de la importante ausencia, el equipo fue respondiendo al favoritismo que se le endosó ante rivales de menor calidad. Y ante los tradicionales como Suiza y Gran Bretaña ofreció un padrón de juego que formalizó el regreso a la Liga mayor.
Las victorias, en la fase final, sobre Australia y México firmaron la vuelta. El último partido ante Colombia servía sólo para determinar al campeón del certamen. La lógica jugó, en la previa, con la Roja. Pero los locales corrieron más y construyeron el 2-0 final que les dio la corona dejando a Chile, por puntaje acumulado, en el tercer puesto. Se agregó el aderezo de los reclamos nacionales por el arbitraje.
“El tercer lugar es mentiroso ya que sólo perdimos un partido. Creo que ante los colombianos nos faltó un poco de suerte para haber rubricado nuestra campaña con el título. Sinceramente, pienso que con Colombia, en cualquier otro lugar lo ganamos”, sintetizó Santos Álvarez quien renovó su contrato para el próximo desafío en su natal San Juan.