Los vamos a reiterar: en Patines y Chuecas el revisionismo histórico es un ejercicio que apasiona. Sobre todo, a nuestro editor Jorge Rodríguez Cáceres. Por eso, tal como desde hace un par de semanas, presentamos la tercera entrega con los próceres anónimos que fomentaron la práctica del hockey con la formación de clubes. ¡Ah! Y en la siguiente lista queda claro que Santiago no es Chile.
Maestranza Central: El insigne club de San Bernardo formalizó la creación de su rama de hockey el 3 de diciembre de 1945, gracias a los oficios del dirigente Javier Rodríguez. El cuadro, que lucía camiseta con listados negros y blancos, jugaba en la Plaza de la comuna con cuatro equipos y una rama femenina. Y a mediano plazo anunciaba sus intenciones de “construir una cancha exclusiva para la práctica del hockey que, con seguridad, será la mejor de Sudamérica”.
Fernández Vial: El popular equipo penquista se afilió a la Asociación Concepción en 1947, gracias al empeño del fundador de la rama, José Oportus. Con jugadores como Héctor Lucero, Sergio Seiter, René Field y Jorge González, el equipo del Almirante oficiaba de local en la estación de ferrocarriles.
Antofagasta: También en 1947, se informaba desde la Perla del Norte que el administrador de la Aduana del puerto, David Burns, fomentaba este deporte a través del club de esa sección, el Deportivo Aduana. Lamentablemente, todo se quedó en el entusiasmo.
Universitario de Concepción: Tras un primer equipo que se formó por el Decreto 230 en la década de los 40 como una rama más de la Casa de Estudios, en 1965 se institucionalizó el club propiamente tal gracias a René Hermosilla Gacitúa, quien había sido dirigente del fútbol y básquetbol en El Campanil. Todo partió cuando Hermosilla vio a algunos estudiantes improvisar pichangas en los estacionamientos de la Universidad, lo que permitió el surgimiento de valores como el portero Manuel Díaz más Ney López, Patricio Chávez y el Mono Ibáñez.
Deportes Concepción: Nuevamente, René Hermosilla Gacitúa dejó su impronta cuando, cuatro años después de formar el Universitario, fue llamado por la dirigencia del club lila para formar la correspondiente rama de hockey. Además de reforzarse con algunos valores de la U de Conce, surgió como referente Tommy Isaacson.
San Javier: En la comuna dela Séptima Región la historia comenzó en la primera mitad de la década de los 60, con los ímpetus de un joven llamado Carlos Soto –sin ninguna relación con los hermanos Soto, ídolos en Ciclón y Thomas Bata- a quien, entusiasmado por este deporte, su familia adquiría implementación para que los practicara junto a sus cercanos. Fomentó más lo anterior con la visita de algunos equipos capitalinos, como Guadalupe de México, para realizar exhibiciones en la localidad. Pronto hubo contagio a otros niños sanjavierinos, protagonizando algunas pichangas en la losa del Club Social de San Javier. Todo eso posibilitó que el 14 de noviembre de 1970 se fundara el Hockey Club San Javier. Paralelamente, otras instituciones polideportivas de la zona –como Comercio, 5 de Abril, Colo Colo, Tricolor y Liverpool- crearon sus respectivas ramas de hockey.
Talca: Por esa misma época, aproximadamente en 1968, en la vecina ciudad del Piduco todo comenzó con el entusiasmo de un sacerdote, el Hermano Pavlovic, quien llegó al colegio Salesianos de la ciudad con patines, chuecas y toda la equipación para la práctica de la disciplina. El entusiasta curita logró incentivar a algunos de sus alumnos para iniciar el hockey en la zona –y la correspondiente rivalidad con San Javier-.
Iquique: La actividad en el puerto histórico –mucho antes de ser sede del Mundial Femenino- comenzó en 1978 gracias a la labor del ex hockista de Aviación y efectivo de la Fuerza Aérea, Pablo Oliva Césped –hasta el año pasado, vicepresidente de la Federación Chilena de Hockey y Patinaje-, quien había sido trasladado hacia la capital de la Primera Región. El deportista-dirigente fue secundado en su labor por Julio Rodríguez, especialista en carreras, más los también entrenadores Luis Jara y Florencio Díaz. Oliva fundó el club Aviación, dando forma a una competencia que incluyó a los representativos de Armada y Colegio Don Bosco.
Deportes Laja: El club forestal nació en 1978 a partir de los ímpetus del ex jugador de Maestranza de Huachipato, Octavio Ríos, quien se desempeñaba en la sección de Relaciones Industriales de la Papelera en Laja. El popular Talo tomó contacto con otros hockistas que laboraban ahí –como René Hermosilla hijo, Ricardo Cacho Vidal, Enrique Villalobos y Oscar Morales- para formar el quinteto. Y de paso, surgió al año siguiente el tradicional Torneo de Verano que durante una década formó parte de la agenda hockística en la segunda quincena de enero.
El Salvador: Contagiados por el impacto que significaron las transmisiones televisivas del Mundial disputado en Talcahuano, en noviembre de 1980, un grupo de directivos de la División El Salvador de Codelco comenzó con la idea de llevar los patines y chuecas hasta el campamento minero de la Tercera Región. Esos visionarios fueron Arturo Arriagada, Jorge Bustos, Emilio Marín, Jorge Pavez y Jorge Varas. Pese a la distancia, fomentaron que los niños que se entusiasmaron con este deporte se las arreglaran para participar en los Torneos Nacionales. Entre los primeros jugadores se contaba a Rodrigo Cototo Rojas, Francisco Bernabeu y los hermanos Flores; mientras que los primeros técnicos fueron Jorge Pavez, Emilio Marín y David Cleveland.
Excelente reportaje, echar una mirada retrospectiva a nuestro querido hockey sobre patines, nos sirve a los viejos para rememorar momentos importantes que marcaron nuestra juventud y, a los jóvenes, para saber lo que ha pasado con en este deporte que hoy practican con tanta pasión y que siempre deberán luchar para superar todo lo alcanzado anteriormente………..Felicitaciones