Curiosas coincidencias conforman el origen de lo que hoy es el hockey master –mayores de 40 años de edad- a nivel continental. En los albores del siglo XXI, los reencuentros con amigos de juventud con los que se compartía la afición de los patines y chuecas fueron la base de lo que hoy es una fuerte edificación.
Ejemplos particulares hay en cada país. Por ejemplo, en Argentina comenzó en 1989 lo que hoy es conocido como el Encuentro de Veteranos, que ya tiene carácter de internacional. Esto, además, propició el nacimiento de los llamados torneos Maxi Hockey en San Juan, a inicios de la presente centuria.
Paralelamente, en Chile, en los inicios del año 2000, una convivencia familiar que sirvió para que el ex hockista de Ciclón Jaime Zúñiga, radicado en España, jugara algunos partidos con sus primos dio origen al que hoy es el Internacional de Veteranos, que se disputa de forma anual en febrero. Esto sólo fue la extensión de las actividades que desde 1994 realizaba el Cemif, Círcilo de Antiguos Ex Miembros de la Federación Chilena de Hockey y Patinaje. Y que se consolidó en 2009 con el comienzo de la Liga Senior, que este año pasó a llamarse Liga Nacional de Hockey Master.
Todo lo anterior confirmó que se mantiene, de forma indeleble, la pasión. Pasión que permite que hoy se cuente con una concreta competencia continental que, de acuerdo a lo que se ha logrado en los últimos cuatro años, pareciera no tener techo.
Esta suerte de bolivarismo hockístico lo resumió Alberto Forero, hockista colombiano y también presidente de la Liga de Patinaje y Hockey del Atlántico, quien señaló previo al comienzo del VII FestiVerano en Barranquilla, que “como en todo campeonato siempre hay rivalidad. Pero ya uno a esta edad trata de cuidarse más. Aquí prima más que todo la amistad y el reencontrarse con las amistades que ha dejado el hockey”.

El génesis. Con esas actividades particulares, la convivencia sudamericana tiene su navidad en agosto de 2014, cuando el equipo chileno Llano Subercaseaux –a través de su delegado, Cristián Riveros- tomó contacto con la organización del torneo FestiVerano de Barranquilla, representado por Raúl Bustamante, para participar en el certamen que, hasta ese momento, sólo congregaba a clubes colombianos.

Tras esa primera incursión internacional, el ejemplo caribeño comenzó a ser imitado. A través de las redes sociales, se contactó a clubes de veteranos en otros países. Fue así que en octubre de 2015 se disputó la primera versión del Torneo Internacional en la cancha del León Prado con la concurrencia de Cuzamba de Barranquilla y Syrah de San Juan, que se llevó el trofeo de campeón.
El envión fue fuerte. Porque en agosto de 2016 el FestiVerano tomó mayor fuerza al integrar a los argentinos de Comunicaciones de Buenos Aires y a los brasileños de Internacional de Regatas de Santos.
Aprovechando esa coyuntura, se formó la Agrupación Sudamericana de Hockey Master cuya dirección está a cargo, hasta hoy, de un representante de cada país en competencia. A saber, Raúl Bustamente (Colombia), Cristián Riveros (Chile), Ruy Casale (Brasil) y Adrián García Sage (Argentina). A partir de ahí, se elaboró un calendario que dio forma a lo que hoy es el Circuito Sudamericano de Hockey Master.
La consolidación fue en 2017, con la disputa de la primera versión de la Copa Sudamericana en Santos, en mayo; del Torneo Internacional de Santiago, en noviembre; y del Mundialito en San Juan, en diciembre. También, la gira que en enero pasado realizó Huachipato por Portugal y España.
Súmele lo sucedido a nivel local, donde cada Liga se fue consolidando. De hecho, el campeonato chileno fue tomado como modelo, en cuanto a organización, para que este año comenzara a rodar la Liga Nacional de la categoría.
Las razones del auge. Sin estar al albergo de una Federación, los hockistas masters han dado muestras de una cabal organización. Comenzando por la mencionada calendarización anticipada de torneos, lo que permite tener el tiempo suficiente para planificar el financiamiento de cada viaje. Porque, hay que decirlo, cada equipo autogestiona sus gastos, no reciben aportes estatales ni de auspiciadores.
También, el hecho de haber estado en la alta competencia –conviviendo desde astros que, en sus años mozos, jugaron Mundiales hasta aquellos que en su tiempo fueron casi eternos reservas, pero que hoy han demostrado capacidad de liderazgo- les permite contar con el acervo y empatía para dirigir los destinos de la organización. Aval de suma importancia, qué duda cabe.

Vale agregar el tema de la difusión, factor importante. Toda vez porque con elementos básicos como una página web más una cámara de celular se transmiten y dan a conocer las alternativas de cada campeonato. Esto es la mejor manera para salir del nicho exclusivo y reducido y dar a conocer lo que está sucediendo.
Con todo este marco, se ha podido apreciar en cancha –algunos, manteniendo o superando su calidad conocida- a los argentinos José Luis Páez, Maxi Salinas, Juan Manuel Garcés, Nelson Jaime, Leandro Laciar, Raúl Monserrat, Miguel Villavicencio, Juan Manuel Ortega y Roberto Bueno; los brasileños Alan Karam y Fernando Louzada; y los chilenos Jorge Sinsay, Miguel Lorca y José Antonio Oñate.
Además, se ha propiciado que participen equipos tan lejanos como Vigor de Medellín, por el norte; y Jauría Santa Cruz de Río Gallegos, en el extremo sur de nuestro continente –de paso, el equipo de hockey más austral del mundo-.

Lo que se viene. La agenda master consulta, a partir del 7 de septiembre próximo, la participación en la Copa Latina de Veteranos, en Alcobendas, España. Por esta parte del mundo jugarán Granates UVT y Concepción Syrah, de Argentina; y Llano Subercaseaux, de Chile.
Además de lo que significa alinear en Europa, el hecho que tres de los llamados Cuatro Grandes del hockey master sudamericano –el cuarto es Internacional de Regatas- deriva en que será la formalización de acercamientos con los veteranos del Viejo Mundo, los que a través de la Evricup hace casi un cuarto de siglo han dado forma a la categoría por esos lares. Que tendrá su vuelta de mano en noviembre con la realización de la segunda versión del Torneo Internacional en el GOM de San Miguel.
Y antes, en octubre, Recife será sede de otro certamen de la categoría, donde los masters nacionales serán representados por Academia.
Todo lo anterior reafirma que lo del hockey master a nivel mundial, en grandes rasgos, y del sudamericano, en particular, no es una tendencia con fecha de vencimiento sino que una realidad que se avizora a largo plazo. Experiencia hay de sobra.
