
(Por Jorge Rodríguez Cáceres) No ha pasado una semana desde que se conoció que Estados Unidos será la sede del II Panamericano de Naciones, clasificatorio para los World Roller Games de San Juan, y ya está preparando su potencial intervención en el torneo el representativo de Costa Rica.
Poco conocido en el Planeta Hockey, porque el conjunto tico luce un breve historial al intervenir sólo en el Mundial B de México en 1986, la Copa América de Vic 2010 y el Mundial Juvenil de Cartagena de Indias en 2013. Todo eso fue posible por los afanes de un hombre, Carlos Pérez, quien hoy con 60 años de edad ya anunció que “voy a jugar en el Panamericano”.
Por eso, no es un lugar común señalar que la historia del hockey costarricense y Carlos Pérez constituye una simbiosis. “Todo comenzó en 1982. Aquí en San José había muchas pistas de patinaje, y en una de ellas el dueño tenía unos sticks botados y con un grupo nos entusiasmamos para comenzar a pegarle a unas bolas que él tenía botadas por ahí. Lo mejor es que yo tenía un vecino español que conocía el juego, así que nos comenzó a enseñar” recuerda el popular Carlitos quien resume todo diciendo que “a partir de ahí el gusanito del hockey me picó”.

Tanto fue el entusiasmo, que sólo cuatro años después esos entusiastas deportistas protagonizaron el debut internacional en el mencionado Mundial en los lares mexicanos. “Un amigo costarricense nos avisó que en Guatemala, que había ido al Mundial de Barcelos en 1982, ya no usaban esos sticks así que nos la arreglamos para conseguirlos y usarlos. Eran unas Reno naranja”, agrega Pérez.
Incluso, Carlos Pérez fue el autor del primer gol internacional de los costarricenses, en la derrota 21-1 ante México, el 6 de octubre de 1986 en la cita azteca. Pero él no hace aspavientos a esos hitos en su carrera. “Prefiero trabajar en silencio, porque hay mucho por hacer” manifiesta.

Todo ese proceso ha refrendado el sello que caracteriza hasta hoy a la disciplina en las tierras centroamericanas, un sello con improntas épicas. “Todo lo hacemos nosotros. Nuestros primeros sticks los armó un amigo que se dedicaba al trabajo en madera. Claro que se rompían después de los primeros golpes, pero igual seguíamos adelante”, comenta.
Tal es la estrechez de implementación, que Carlos Pérez tiene guardados unos juegos de ruedas para superficie de parqué que sólo se utilizaron en la Copa América de Vic y que tal vez reutilice en Estados Unidos. “Apenas volvimos acá desde España, las saqué esas ruedas de los patines y ahí las tengo en una caja”, recalca el apasionado hockista.

La difusión del actual momento costarricense a través de Patines y Chuecas + Patín TV ha servido para comenzar a realizar una campaña continental de apoyo a los ticos. Es más, el ex presidente de la Federación local, Oscar Jiménez, actualmente radicado en Estados Unidos, ya se comprometió con el envío de un juego de ruedas y sticks nuevos.
También, los representantes centroamericanos están recibiendo asesoría técnica, vía plataformas digitales, del entrenador argentino Carlos Beto Núñez.

Haciéndolas todas. Por de pronto, la tarea principal es el reclutamiento de quienes integrarán el plantel panamericano. Para ello, están recontactando a quienes formaron el equipo juvenil en Cartagena de Indias, hace siete años.
“Aquella vez fuimos con un representativo de sólo seis jugadores y dos arqueros. Y los estamos llamando para que vuelvan. Por lo menos, ya contamos con Albert (Ramírez) quien fue el más destacado de ese equipo. Como les digo, ya estamos trabajando” apostilla Carlos Pérez.
La contra es que no hay siquiera una Liga local donde echar mano a potenciales seleccionados. Todo es, literalmente, boca a boca para juntar al grupo.

Brazo derecho en todo esto ha sido José Acosta, arquero sanjuanino nacionalizado costarricense quien, en 2017, comenzó a colocar el nombre de Costa Rica en el concierto hockístico internacional, otra vez. “Aproveché la celebración del Mundialito Master en San Juan, donde la organización del campeonato me apoyó armando un quinteto con amigos argentinos y brasileños. Terminamos en el sexto puesto, estuvimos a un paso de clasificar a semifinales ante Teresópolis, que nos venció 2-1” recuerda.
Pérez y Acosta, literalmente, están haciendo toda la fuerza. De hecho, fueron ambos los que fueron colocando otra vez las barandas en la pista La Sabana en San José, para poder contar con una cancha. Y como en los tiempos ancestrales del hockey-patín, ofician al mismo tiempo de entrenadores, dirigentes, albañiles, relacionadores públicos y mecánicos. “Es lo que amamos” recalca José.
Como ya se expuso, ya han habido muestras de apoyo que se irán concretando en las próximas semanas. Eso refuerza lo que anunció José Acosta: “Queremos que la bandera de Costa Rica desfile y flamee en el Panamericano. Y así será”.
Épico, sobrecogedoramente épico.
