Nuestro editor se refiere y realiza una observación a lo sucedido este viernes 15 en el marco de la Liga de Honor, cuya jornada finalizó más allá de la 1 de la madrugada producto de una desinformación que corrió toda la programación, afectando a los jugadores y al público.
ENTRE CHUECAS Y MEDIANOCHE
Inexplicable lo sucedido este viernes en el marco de la segunda fecha de la Liga de Honor. Inexplicable que no se respeten los horarios prefijados para la tripleta de partidos correspondientes a la jornada. ¿Es qué los responsables de la confección del fixture no sabían que habría una ceremonia premilitar en el embaldosado del GOM, que atrasaría todo, prácticamente, en una hora y media?
Lo vivido el viernes pone sobre la cancha una situación de fondo: la falta de respeto hacia los jugadores y hacia el público que se apersona en el reducto sanmiguelino.
Por el lado de los hockistas, son ellos a los que se debe cuidar. No hay que olvidar que la mayoría cumple horarios laborales durante el día, dejando los ratos vespertinos para calzarse los patines. Por ende, no se le puede pedir rendimiento si su partido, que debía iniciarse a las 22.30 comience recién pasada la medianoche.
Por el lado del público –el poco que está llegando al GOM-, éste se programa para presenciar los encuentros porque o bien son parientes de los jugadores o, simplemente, son seguidores hockísticos que tienen como panorama de día viernes ir al reducto de Salesianos con Ochagavía para después extender la velada en alguno de los pubs del sector –en el caso de este redactor, se va a la sandwichería de un amigo suyo donde la mayonesa casera es exquisita-.
En la historia de nuestro hockey, una de los principales puntos que se establecieron al conformarse el Torneo Metropolitano en 1967 era la puntualidad en el comienzo de los partidos. Y esto era por el respeto al público asistente a las diferentes canchas. ¿Es tan difícil cumplir eso hoy, en pleno siglo XXI qué es sinónimo de modernidad?
Ahora bien, lo sucedido este viernes debiera ser la inflexión para que el debate que tímidamente se dio en la previa del inicio de esta temporada tome caudales concretos. Porque sabido es el deseo de muchos protagonistas de la Liga que cada equipo oficie de local en su feudo, tal como se realiza en la Liga Regular. Porque, que yo sepa, a modo de ejemplo, en la OK Liga española no obligan a los equipos catalanes a viajar cada fin de semana a Madrid para disputar su correspondiente pleito.
Es un debate necesario, para que la principal categoría de la Liga Nacional no se estanque. Y en una de ésas, se podría agregar a la lista de puntos a tratar el aumento de clubes participantes. Todo sea para nivelar hacia arriba.
Ahora, entre nos, tal vez algún despistado que llegó hasta el GOM este viernes pensó que la jornada se trataba de una reedición de las 18 Horas de Hockey que se realizaron en diciembre de 1986, en la desaparecida pista El Llano con partidos durante toda la noche en una jornada que se extendió desde las 18 horas de un viernes para terminar al mediodía del sábado. Pero ahí fueron puntuales en los horarios…
Al finalizar, a este redactor sólo le resta decir que todo lo expuesto en estas líneas fue –como diría el Mago Valdivia- con respeto…
Atte..
Jorge Rodríguez C.
