El buen desempeño de Ciclón en la competencia propició que sus principales referentes llamaran la atención del aficionado y de la prensa especializada. Y también de otros clubes, como lo sucedido con Hugo Valdivia, los hermanos Soto y Jaime Cabello quienes cambiaron las costas viñamarinas por la tranquilidad de Peñaflor para reforzar a Thomas Bata.
También, ex jugadores ciclonenses daban vida a nuevas instituciones que fortalecieron la competencia viñamarina. Por ejemplo, empleados del Casino Municipal que habían tenido un paso con la camiseta roja formaron la rama de hockey de Camuvi. Y otros que se dedicaban al comercio formaron, en 1968, justamente el club Comercio de Viña; mientras que Enrique Marguiz aglutinaba a los niños que vivían en la Villa Independencia en Las Achupallas para crear el club Los Extraños.
Pero en ese año el club sufriría un duro golpe al perder su cancha, el llamado Coliseo, de 1 Oriente. Las autoridades edilicias de aquellos momentos habían quitado la concesión a la institución para instalar algunos estudios del canal de televisión UCV. Ante eso, el directivo Guillermo Quiñones realizó las gestiones ante algunos regidores para lograr la reparación de una antigua cancha de básquetbol ubicada en una explanada del sector Forestal Alto.