El presidente de WSR, el portugués Fernando Claro, descartó, a través de una carta oficial, conversar siquiera la posibilidad de establecer estructuras estratégicas en el organismo rector del hockey-patín europeo tras las recomendaciones solicitadas por ocho federaciones integrantes del conglomerado.
Vale recordar que a inicios de marzo pasado, las federaciones de Andorra, Austria, Bélgica, Inglaterra, Alemania, Holanda, Israel y Suiza propusieron cambiar los actuales moldes para mejorar la administración de la actividad a través de la creación de una Junta Directiva con posibilidad de votación igualitaria de los doce países que conforman WSE.
Sin embargo, Fernando Claro calificó como “ilegales” y de contradicción con los estatutos las intenciones de promover este deporte, según las recomendaciones de los ocho países firmantes. Si se formara una Junta Directiva, dijo, no sería aceptada por World Skate y World Skate Europe. “Y así es como funciona la democracia”, escribió el dirigente.
Presiones y firmas. Previo a esta respuesta de WSE, las ocho “federaciones pequeñas” dieron un paso más y buscaron conversaciones con el presidente de World Skate, Sabatino Aracu, y con el chairman de hockey sobre patines, Carmelo Paniagua.
Para ponerle más pimienta al asunto, en el saludo de Pascuas que envió Worlds Skate Europe a sus asociados no aparecen como firmantes los representantes de Alemania, Francia y España.
Al respecto, nuestro sitio asociado RH-News expuso que el hispano Francesc Gil, encargado de las competiciones internacionales con mucha experiencia en el reconocido torneo juvenil Eurockey, dejó el Comité porque no estaba satisfecho con el funcionamiento del mismo, la forma en que se tomaban las decisiones y cómo se comunicaban, y extrajo las consecuencias.
Con relación al alemán Thomas Ullrich, es uno de los defensores de los intereses de las “federaciones pequeñas” por lo que es probable que haya caído en desgracia.
Y del francés Lucas Gaucher su situación es menos clara, sin embargo su club, La Vendéenne, es uno de los que ha exigido la devolución de los fondos de las competiciones europeas, tema que no se conversa en la cúpula de WSE.